He aquí una idea que de seguro pondrá a muchos a pensar: una máquina reproductora/recicladora de platos para que nos olvidemos de fregar, secar y guardar nuestras vajillas.Junto a planchar y limpiar el piso, probablemente fregar sea una las tareas más tediosas. Y esta, al igual que comer, ya sea comida comprada por ahí o legítimamente casera, se tiene que hacer varias veces al día. Si bien los lavaplatos automáticos existen desde hace décadas, estas máquinas raras veces satisfacen las expectativas. Otra alternativa son los platos desechables, pero esto implica un gasto continuo y tiene un impacto negativo sobre el medio ambiente.
La solución, según Leonardo Bonanni, graduado del Instituto Tecnológico de Massachussets (MIT), es una máquina de reciclaje de platos, a la que ha llamado Dishmaker (en la imagen). El concepto aquí es fabricación personalizada según las necesidades del momento, de tal manera que no haya que salir a comprar platos, que no tengan que lavarse ni mucho menos guardarse, lo que en ocasiones representa espacio desaprovechado.
Bonanni y su equipo, quienes fabricaron el prototipo de Dishmaker en el laboratorio de multimedia del MIT, hacen mucho énfasis en esto del almacenamiento, pues en la mayoría de los hogares se encuentran utensilios arrumbados que fueron comprados “para cuando se presente la oportunidad de usarlos”. Un buen ejemplo es cuando se compra una vajilla para 8 personas cuando solo viven 4 personas en una casa, por aquello de que puede llegar visita o puede romperse una de las piezas.
El material usado por Dishmaker en la fabricación de platos es el acrílico, que presenta varias ventajas ante el plástico, siendo una de ellas que tiene memoria de forma, lo que significa que bajo ciertas condiciones vuelve a su forma original, lo que a su vez elimina la necesidad de derretirlo en el proceso. En términos sencillos esta es una máquina de fabricación controlada por PC en la que se tiene una interfaz gráfica para elegir el tipo y cantidad de platos necesarios.
Hasta el momento la máquina puede producir un plato cada 90 segundos y ofrece tres tipos: platos, fuentes y tazas. Se prevé en un futuro que Dishmaker ofrecerá una amplia selección de utensilios de cocina y un lavador integrado para eliminar los desechos de comida. La interfaz será muy parecida a los paneles de microondas, con botones para seleccionar cantidad y tipo de plato. De momento se trabaja para que la máquina ofrezca volumen y rapidez sin límites.
Bonanni y su equipo, quienes fabricaron el prototipo de Dishmaker en el laboratorio de multimedia del MIT, hacen mucho énfasis en esto del almacenamiento, pues en la mayoría de los hogares se encuentran utensilios arrumbados que fueron comprados “para cuando se presente la oportunidad de usarlos”. Un buen ejemplo es cuando se compra una vajilla para 8 personas cuando solo viven 4 personas en una casa, por aquello de que puede llegar visita o puede romperse una de las piezas.
El material usado por Dishmaker en la fabricación de platos es el acrílico, que presenta varias ventajas ante el plástico, siendo una de ellas que tiene memoria de forma, lo que significa que bajo ciertas condiciones vuelve a su forma original, lo que a su vez elimina la necesidad de derretirlo en el proceso. En términos sencillos esta es una máquina de fabricación controlada por PC en la que se tiene una interfaz gráfica para elegir el tipo y cantidad de platos necesarios.
Hasta el momento la máquina puede producir un plato cada 90 segundos y ofrece tres tipos: platos, fuentes y tazas. Se prevé en un futuro que Dishmaker ofrecerá una amplia selección de utensilios de cocina y un lavador integrado para eliminar los desechos de comida. La interfaz será muy parecida a los paneles de microondas, con botones para seleccionar cantidad y tipo de plato. De momento se trabaja para que la máquina ofrezca volumen y rapidez sin límites.
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