Como alternativa a los carros impulsados por gasolina y otros derivados del petróleo se han visto modelos híbridos, solares, eléctricos e impulsados por hidrógeno. Pero jamás se había presentado un carro impulsado por aire… hasta ahora.
Desde hace aproximadamente 7 años el ingeniero francés Guy Nègre, ex empleado de Fórmula 1, busca hacer realidad esta idea, que figura en una de las obras de Julio Verne (1818-1905).
La clave está el uso de aire comprimido específicamente. Un simple experimento con un globo lleno de aire y un alfiler pueden dar una muy buena idea del efecto que puede tener la expansión de aire comprimido, y es precisamente bajo este principio que funciona el prototipo mostrado por Nègre en Ginebra a través de su compañía MDI (Motor Development International)
Este prototipo, llamado AIRPod, está en planes de producción para esta primavera y de por sí las líneas aéreas Air France y KML han anunciado que llevarán a cabo un programa de pruebas en sus respectivas bases, ubicadas en París y Ámsterdam. Por si fuera poco, MDI, que trabaja conjuntamente con el grupo indio TATA en la manufactura y desarrollo de estos carros de aire, tiene en planes otros modelos, también impulsados por aire.
A simple vista, el AIRPod luce bastante extraño. Se trata de un vehículo compacto, y súper liviano, con carrocería hecha de fibra de vidrio y poliuretano para un peso total de menos de 500 libras. El diseño aerodinámico del AIRPod y su mecánica interna implican el uso de tres ruedas y una sola puerta.
AIRPod está diseñado para 3 pasajeros, con los asientos traseros apuntando hacia atrás como forma de ahorrar espacio. Por si fuera poco, el vehículo carece de volante y pedales, siendo manejado únicamente con una palanca. Por cierto, las dos ruedas traseras son las que hacen todo el trabajo. El sistema de aire acondicionado funciona con el aire que es expulsado, cuya temperatura oscila entre 0 y -15 grados Celsius.
Al ser tan liviano, AIRPod solo necesita una fuerza de 5 caballos y medio para alcanzar una velocidad de 70 kilómetros por hora. El motor, diminuto como el carro, es de 180cc. El tanque, con capacidad para 175 litros de aire comprimido a una presión de 350bar, 180 veces más que la presión aplicada a las ruedas de un carro convencional, da para recorrer 220 kilómetros.
AIRPod puede recargarse conectando el compresor a un enchufe convencional, lo que tomaría cerca de dos horas, o en estaciones especiales, donde tomaría menos de 2 minutos. A un precio aproximado de 7,500 dólares valdría la pena probar el AIRPod, que como beneficio adicional no contamina y es barato de mantener.
Desde hace aproximadamente 7 años el ingeniero francés Guy Nègre, ex empleado de Fórmula 1, busca hacer realidad esta idea, que figura en una de las obras de Julio Verne (1818-1905).
La clave está el uso de aire comprimido específicamente. Un simple experimento con un globo lleno de aire y un alfiler pueden dar una muy buena idea del efecto que puede tener la expansión de aire comprimido, y es precisamente bajo este principio que funciona el prototipo mostrado por Nègre en Ginebra a través de su compañía MDI (Motor Development International)
Este prototipo, llamado AIRPod, está en planes de producción para esta primavera y de por sí las líneas aéreas Air France y KML han anunciado que llevarán a cabo un programa de pruebas en sus respectivas bases, ubicadas en París y Ámsterdam. Por si fuera poco, MDI, que trabaja conjuntamente con el grupo indio TATA en la manufactura y desarrollo de estos carros de aire, tiene en planes otros modelos, también impulsados por aire.
A simple vista, el AIRPod luce bastante extraño. Se trata de un vehículo compacto, y súper liviano, con carrocería hecha de fibra de vidrio y poliuretano para un peso total de menos de 500 libras. El diseño aerodinámico del AIRPod y su mecánica interna implican el uso de tres ruedas y una sola puerta.
AIRPod está diseñado para 3 pasajeros, con los asientos traseros apuntando hacia atrás como forma de ahorrar espacio. Por si fuera poco, el vehículo carece de volante y pedales, siendo manejado únicamente con una palanca. Por cierto, las dos ruedas traseras son las que hacen todo el trabajo. El sistema de aire acondicionado funciona con el aire que es expulsado, cuya temperatura oscila entre 0 y -15 grados Celsius.
Al ser tan liviano, AIRPod solo necesita una fuerza de 5 caballos y medio para alcanzar una velocidad de 70 kilómetros por hora. El motor, diminuto como el carro, es de 180cc. El tanque, con capacidad para 175 litros de aire comprimido a una presión de 350bar, 180 veces más que la presión aplicada a las ruedas de un carro convencional, da para recorrer 220 kilómetros.
AIRPod puede recargarse conectando el compresor a un enchufe convencional, lo que tomaría cerca de dos horas, o en estaciones especiales, donde tomaría menos de 2 minutos. A un precio aproximado de 7,500 dólares valdría la pena probar el AIRPod, que como beneficio adicional no contamina y es barato de mantener.
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